El hecho de que dividamos la prehistoria en Edad de Piedra, de Cobre, de Bronce y de Hierro, explica que el uso de minerales ha acompañado al ser humano en sus actividades: la caza, la manufactura, la preparación de alimentos e incluso para las guerras. La importancia de los yacimientos minerales en la conformación de espacios económicos radica en dos aspectos: el primero es que los minerales obtenidos de la naturaleza no son funcionales ya que necesitan un proceso industrial para su aprovechamiento. La conformación de centros mineros favorece el desarrollo de otras actividades económicas en el territorio.
El segundo aspecto consiste en que los centros mineros favorecen el surgimiento de asentamientos humanos, que incluso puede convertirse en ciudades de importancia mundial; como Guanajuato, Zacatecas o San Luis Potosí, que surgieron por la extracción de plata en el virreinato.
Para el desarrollo de la industria México aprovecha minerales energéticos; el carbón se utiliza como combustible en Coahuila. El petroleo y el gas natural son energéticos que se distribuyen mediante eleoductos y gasoductos. A mediados del sigo XX la región de donde mas se extraía petroleo era la ubicada entre Veracruz, Tamaulipas y San Luis Potosí. La distribución de los yacimientos de petroleo en la Llanura del Golfo de México han permitido el desarrollo de la industria petroquimica en el sur de Veracruz y el crecimiento urbano en la región.
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